Muchos jugadores hablan de las corazonadas como si fueran un poder místico que, simplemente aparece. Pero en realidad, lo que llamamos intuición es una construcción compleja de experiencia, patrones inconscientes y lectura emocional de las demás personas que nos rodean. Esta nota explora cómo desarrollarla de forma consciente y útil… sin caer en las supersticiones.
La intuición en el póker es una herramienta poderosa si se entrena y se interpreta con buen criterio.
El mito del “feeling” La historia está llena de jugadores que se jactan de haber “sentido algo raro” justo antes de hacer un gran fold o hero call. Y aunque algunos lo romantizan y otros lo ridiculizan, la intuición en el póker no es magia, es una lectura interna, rápida y muchas veces inconsciente de patrones que el cerebro ya ha visto antes, adquirido por las experiencias de jugar cientos o miles de manos contra las mismas personas o perfiles similares de jugador.
Como dijo la leyenda Phil Ivey en una entrevista con Joe Ingram:
“Mucha gente cree que tengo poderes sobrenaturales en la mesa, pero en realidad veo cosas que otros no ven… porque llevo viéndolas toda mi vida.”
Y no está solo, la ciencia respalda esta idea, estudios de psicología cognitiva muestran que las decisiones “intuitivas” no son irracionales, sino respuestas rápidas basadas en memoria implícita y decisiones tomadas de manera subconsciente.
Entonces… ¿Cómo se construye una buena intuición?
Tu instinto en las mesas se entrena. Así como estudias rangos o bet sizings, puedes mejorar tu capacidad de “sentir” bien una situación:
- Revisión de manos sin solver al principio: Pregúntate qué te dice tu estómago antes de revisar la solución. ¿Estás sorprendido? ¿Coincide?
- Volver a ver spots que jugaste y sentiste algo: ¿Por qué dudaste? ¿Qué viste en el rival?
- Practicar los reconocimientos de patrones: Presta atención a cosas como tamaño de apuestas inusuales, líneas extrañas o gestos repetitivos acompañados de tells.
Intuición no es impulso
La trampa está en creer que cualquier corazonada es buena. El ego, el tilt y la fatiga pueden disfrazarse de intuición… por eso es clave tener autocontrol y honestidad. Una corazonada real suele sentirse tranquila, clara y lógica, aunque no tengas palabras para explicarla al instante, simplemente “és”.
Como dijo Liv Boeree, astrofísica, team pokerstars pro y campeona de EPT San Remo:
“Las mejores intuiciones no llegan en medio del caos emocional, sino cuando la mente está en calma y presente.”
Sin embargo, Liv, en una charla en TED, nos invita a reflexionar también acerca de ellas y no dejarnos llevar 100% por los impulsos y detenernos a pensar, si queremos llegar a codearnos con los mejores, tendremos que dejar las intuiciones a un lado y basar la toma de decisiones en un análisis lento y meticuloso de cada situación:
“nuestras intuiciones no son tan correctas o cercanas a la perfección como a nosotros nos gustaría creer. El instinto está bien, pero solo en situaciones donde tengamos mucha experiencia como para basarnos en él.”
Ejercicios para entrenarla
- Haz pausas de 3 segundos antes de cada decisión. Permítete “escuchar” sin responder al primer impulso.
- Juega sin HUD por sesiones cortas (online). Te obligará a leer más allá de los números.
- Toma notas después de manos donde seguiste tu instinto. ¿Funcionó? Si, no, ¿Por qué?
Conclusión
La intuición no es una excusa para jugar mal ni una bola de cristal. Es una herramienta refinada con experiencia, estudio y escucha interna. No se trata de confiar ciegamente en ella, sino de integrarla como una brújula silenciosa que puede complementar tu lógica cuando todo parece borroso.
♠️♥️ Bluffcentral Crew ♦️♣️
